El efecto séquito

¿Será la sinergia la respuesta del cannabis medicinal?

Dra Lua

3/22/20233 min read

Recientemente pudimos volver a estudiar el cannabis y sus usos médicos. Durante muchos años estuvimos en una edad medieval de la planta, donde las peleas gubernamentales y prohibicionistas retrasaron los muchos usos medicinales de la planta. Por suerte algunos ya los conocíamos y fueron pasados por generaciones o en escritos muy antiguos, otros solo conocemos por pacientes que contrariando las leyes locales cultivan y producen derivados de la planta, como aceites o cremas.

La planta de cannabis por otro lado es aún más compleja que las leyes que la rigen, está formada por cannabinoides como THC o CBD en altas concentraciones sumado a otros compuestos en menor concentración como CBG, terpenos y flavonoides. Estas sustancias normalmente no son medidas por productores hogareños de aceites o aun en los estudios de cannabis medicinal más rigurosos que normalmente establecen las concentraciones de cannabinoides, de receptores y hasta el tiempo que están activados, pero sin medir todos los compuestos y saber exactamente cómo actúan, no podemos confirmar o descartar el famoso efecto séquito (entourage effect).

La mejor forma de explicar el efecto es pensar en que algunas sustancias de la planta de cannabis que aunque no sean activas por sí solas, regulan la actividad de las otras sustancias, lo que demuestra que la unión de todas las sustancias es más fuerte que una sola aislada.

En la medicina ya sabemos que distintos fármacos pueden ser combinados a punto de tener mayor efecto combinados, generando una polifarmacia, común en la medicina tradicional, un ejemplo claro es que cuando un paciente tiene hipertensión se combinan distintos fármacos que actuan distinto antes de subir la concentración de un solo, esta sinergia hace que la hipertensión sea mejor regulada con menos adversos.

En la planta de cannabis la charla de la sincronía de las sustancias dentro de la planta de cannabis fue postulada por Raphael Mechoulam, el padre moderno del cannabis, siendo el químico que aisló la formula del THC y sus descubiertas en el CBD y otros compuestos de la planta de cannabis. El descubrio que habia sustancias dentro de la planta de cannabis que por sí solas son biológicamente inactivas pero que en el cuerpo humano tenían el poder de modular el sistema endocannabinoide. Formulando por primera vez el entourage effect.

Ya fue demostrado que los terpenos tienen efectos por sí solos, no solamente en las plantas de cannabis y fueron usados por muchas sociedades originarias para tratar las patologías más diversas, siendo hoy en dia la base para tratamientos de aromaterapias. Algunos términos como “myrcene” tienen efectos probados en diferentes investigaciones, siendo calmante, relajante y mejora la ansiedad. Entonces, aunque la concentración de estos compuestos en la planta es pequeña se teoriza que la combinación con las altas concentraciones de CBD y THC tenga mayor beneficio.

El sistema endocannabinoide está formado por los receptores CB1 y CB2, los endocannabinoides, lípidos basados en araquidonato endógenos, el N-araquidonoiletanolamida, más conocida como anandamida y 2-araquidonilglicerol (2-AG). Los receptores endocannabinoides están distribuidos por todo el cuerpo de los mamíferos. Se encontraron receptores CB1 y CB2 en el Sistema nervioso central, en el corazón, bazo, sistemas urinario, reproductor, gastrointestinal y endocrino. Lo que nos lleva a pensar en la importancia de la regulación que el sistema endocannabinoide es responsable.

La discusión sobre el efecto se intensifica ya que cada vez más podemos encontrar más fitoterápicos de algunos de los compuestos de cannabis de forma separada o aun sintéticos, es un campo increíblemente lucrativo y novedoso. Ya que el efecto séquito propone que las formulaciones con cannabinoides y terpenos o inclusive que contengan toda la planta son más eficaces en el tratamiento de distintas patologías, con mejores resultados para los pacientes que las formulaciones aisladas o sintéticas, pone en riesgo la eficacia de las formulaciones más industriales.

Por más que aún exista mucha discusión por el efecto, lo que podemos ver es que de la misma forma que nutricionalmente vale más comer una fruta que tomar su jugo, la naturaleza tiene formas que aún no podemos explicar de ser compleja y perfecta.